Jardín zen en miniatura: ¿por qué es genial?

Jardín zen en miniatura: ¿por qué es genial?

¿A veces te estresas 😅 en tu vida diaria y necesitas encontrar algo de serenidad?

El jardín zen en miniatura es un objeto de meditación que te permite despejar tu mente y calmar tu mente. Una verdadera burbuja de relajación, te ayudará a encontrar la paz interior. Ya sea que esté en casa o en la oficina, este accesorio zen alivia el estrés y mejora la concentración.

Descubre las 5 buenas razones para tener un mini jardín japonés de interior y cómo hacerlo tú mismo.

🌱 ¿Qué es el jardín zen en miniatura?

Compuesto por arena blanca, guijarros, plantas y elementos con vocación espiritual, el jardín zen en miniatura invita a la serenidad. Generalmente de apariencia minimalista, algunos incluyen una estatuilla de Buda, campanillas, velas o incluso un porta incienso. Además, hay un mini rastrillo de madera para cepillar la arena, lo que proporciona una auténtica sensación de calma .

El paisaje en miniatura simboliza los elementos naturales. Así, las ondulaciones dibujadas sobre la arena representan el agua, el musgo y las plantas recuerdan los árboles o la naturaleza y las piedras pulidas evocan las montañas. Además de ser un objeto de decoración interior que nos gusta contemplar por su belleza, el pequeño jardín zen aspira a la meditación.

😁 5 buenas razones para tener un jardín zen japonés en miniatura

¿Estas estresado? ¿Un flujo incesante de pensamientos abruma tu cabeza? La meditación es una gran manera de encontrar la paz interior. Además, el jardín zen japonés puede ayudarte a calmar tu mente .

😇 Reducción del estrés y relajación

Arreglando tu jardín japonés, moviendo piedras, plantas y dibujando en la arena, tu atención se centrará en el momento presente y podrás relajarte. En el trabajo, si sientes que la ansiedad te abruma, tómate un descanso de 5 minutos para cuidar el jardín japonés de tu oficina. El simple hecho de concentrarse en otra cosa reducirá su estrés. Ya verás, ¡es mágico!

🧘‍♀ Apoyo para una sesión de meditación

El jardín zen interior en miniatura es una excelente manera de introducirse en el arte de la meditación. ¿Conoces esa práctica budista de enfocar tu mente en el momento presente para permanecer zen?

En primer lugar, solo contemplar y cuidar tu jardín es una forma de meditación. Adopte una postura agradable en una silla, sentado con las piernas cruzadas o en posición de loto para los más experimentados, luego concéntrese en su respiración y en sus sensaciones corporales para liberar su mente. Respira lenta y profundamente mientras dejas que los pensamientos fluyan tranquilamente por tu mente sin apegarte a ellos.

Si te interesa la filosofía budista , puedes meditar sobre temas de reflexión más profundos como el concepto de impermanencia, ausencia del Yo e insatisfacción… Inspírate con algunas citas budistas y déjate guiar por tus sentimientos.

💛 Desarrollo del sentido de la belleza y la imperfección

El pequeño jardín zen japonés forma parte del concepto Wabi-sabi, que celebra la belleza en la sencillez y la imperfección de las cosas , inspirándose en los 7 principios de la filosofía zen. Esta visión artística es muy diferente a los criterios del canon occidental carente de defectos y, hay que admitirlo, bastante suave... ¿Quizás es tanto replantearse su sentido de la estética?

Los 7 pilares de la filosofía Zen

En la estética Wabi-sabi encontramos la sencillez (Kanso) que consiste en eliminar todo lo que no es esencial para llegar a un resultado refinado, desprovisto de cualquier superficialidad. Es un enfoque minimalista que tiene como objetivo lograr la claridad.

La asimetría (Fukinsei) es un concepto inspirado en la naturaleza en el que el equilibrio y la armonía se crean a partir de formas irregulares o incompletas, libres de simetría. Lo natural (Shizen) aboga por la espontaneidad y la ausencia de artificios mientras que la libertad (Datsuzoku) valora la originalidad.

En la estética japonesa, la sensación de calma y tranquilidad (Seijaku) son criterios buscados. La gracia se encuentra en la sutileza y la sugerencia (Yugen) , así como en las marcas del paso del tiempo (Koko) .

Si desea desarrollar su sentido de la estética inspirándose en el concepto Wabi-sabi , puede organizar su pequeño jardín tomando conciencia de los 7 principios de la filosofía Zen. Esto te permitirá cultivar una nueva percepción más espiritual de la belleza.

🎨 Creatividad e imaginación mejoradas

Tu jardín zen en miniatura es una verdadera fuente de inspiración . Cuando lo miras desde diferentes puntos de vista, aprendes a ver las cosas desde una nueva perspectiva. Esto puede ser útil cuando se enfrenta a un problema y busca soluciones. Reinventar regularmente su jardín japonés moviendo las piedras, el punto de agua o dibujando en la arena estimulará su imaginación. Asimismo, si practicas la meditación, desarrollarás una forma diferente de pensar, lo que potenciará tu creatividad.

🎯 Mayor enfoque

Al igual que cualquier práctica de atención plena, cuidar un jardín zen con regularidad es una excelente manera de aumentar su capacidad de concentración . Un estudio demuestra que después de solo once horas de meditación, el área del cerebro responsable de la concentración y el control de las emociones se ve impactada positivamente. Después de algunas semanas de práctica, se mejoran las habilidades de atención. Además, la práctica regular de la meditación tendría muchos beneficios ya que promovería la formación de conexiones neuronales, disminuiría la presión arterial y fortalecería la inmunidad.

🙋‍♂️ ¿Cómo crear tú mismo un jardín zen en miniatura?

Un jardín zen en miniatura de bricolaje es una actividad divertida y fácil de configurar. Simplemente necesitarás traer una bandeja (o marco) de madera, arena blanca, algunas piedritas recogidas en la playa, musgo, pequeñas plantas y un mini rastrillo. Debe encontrar todo lo que necesita en centros de jardinería y tiendas de pasatiempos. La arena será perfecta para un jardín zen interior en miniatura, mientras que la grava pequeña se adaptará mejor al aire libre, si no quieres que todo se vuele con la más mínima ráfaga de viento.

Aquí hay un pequeño tutorial:

Primero, vierte la arena o gravilla en la bandeja de madera , luego extiéndela por toda la superficie.

Luego, coloca las piedras, las plantas y todos los elementos naturales como desees respetando los 7 principios zen. Apila algunas piedras para crear montañas o colócalas horizontalmente para componer islas. Solo recuerda favorecer el número impar y agrupar los elementos por tres, cinco o siete, porque trae buena suerte en la cultura japonesa. Si lo desea, agregue algunos objetos ornamentales (con moderación) como una vela, un pequeño puente o una figura de su elección.

En calma y relajación, dibuja curvas, remolinos y líneas en la arena variando la intensidad . Rodea tus guijarros para formar olas. Crea volúmenes, valles, pequeños montículos de arena. Finalmente, saborea el paisaje que acabas de imaginar y tómate unos momentos para respirar. Más tarde puede reorganizar su jardín japonés como desee.

🙋‍♀️ ¿Dónde comprar un jardín zen en miniatura?

Si no te gusta el trabajo manual o si simplemente prefieres comprar un jardín zen en miniatura , en lugar de hacerlo tú mismo, debes saber que encontrarás lo que buscas en Internet. Pregúntale a tu amigo de Google. También puedes encontrar pequeños jardines japoneses de interior en tiendas como Nature & Découverte así como en algunas tiendas de jardinería.

 

Hecho en casa o no, el jardín zen en miniatura es una muy buena idea para regalar a tus seres queridos (o a ti mismo) . Seguro que este pequeño paisaje de arena te aportará serenidad y se convertirá en una auténtica fuente de bienestar . ¡Basta con rastrillar su arena para darse cuenta!